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| Club Social, sede inaugurada en 1932 |
El país iniciaba una nueva etapa democrática, la primera
detrás de una dictadura cívico militar que le había facilitado el camino a la
oligarquía para retornar al poder en Argentina. El 20 de febrero asume Agustín
Pedro Justo, un hombre de origen radical que ocupó el ministerio de Guerra en
la presidencia de Marcelo Torcuato de Alvear. Este ciclo se lo conoce
popularmente en la historia nacional como la Década Infame, manchada por
los negocios espurios, la corrupción, el fraude y la persecución política de
líderes opositores.
El movimiento que lideró Justo era la Concordancia, como lo
expresamos en el capítulo anterior, quién contó con el apoyo de la Iglesia
Católica que por primera vez expresaba públicamente su sostén a un círculo
político partidario. Desde su primer día «comenzó a poner en práctica sus
políticas anunciadas con un tono mesiánicos que, más allá de solamente destacar
la restauración del orden democrático, parecía que venían a renovar al país por
completo»[1]. Entre
sus principales obras públicas y privadas en las cuales tuvo injerencias esta
gestión podemos
Las principales obras públicas y privadas que se planearon,
iniciaron o realizaron durante el gobierno de Justo fueron el Puente
Avellaneda, el Puente Uriburu, el Puente La Noria, el Obelisco de Buenos Aires,
la construcción de las líneas C y D de subterráneos, y la iniciación de las
obras de la línea E; el Edificio del Ministerio de Obras Públicas, el complejo
de edificios de la Escuela de Aviación Militar y de la Fábrica Militar de
Aviones; el Hospital Militar Central, la modernización del Hospital Fernández, el
Hospital Materno Infantil Ramón Sardá; los edificios de las facultades de
Medicina, Bioquímica y Farmacia, Odontología y Derecho de la Universidad de
Buenos Aires; el estadio Monumental y La Bombonera; la pavimentación de la ruta
a Córdoba y de la ruta a Mar del Plata; el Puente Internacional Agustín P.
Justo - Getúlio Vargas, entre Paso de los Libres (Corrientes) y Uruguayana
(Brasil); la Biblioteca Pública de la Universidad Nacional de La Plata; entre
otras cosas. En todas proyecciones contó con la colaboración de personajes como
Mariano de Vedia y Mitre, Alberto Prebisch, Juan M. Obarrio, Carlos Thays,
Manuel R. Alvarado, Justiniano Allende Posse y Domingo Selva, entre otros bajo
la administración de su ministro de Obras Públicas, Manuel R. Alvarado.
Entre sus ministros tuvo a Carlos Saavedra Lamas como
Canciller, quien llegaría a recibir el Premio Nobel de la Paz por su actitud
conciliadora en la Guerra del Chaco. También las Juntas Nacionales de Granos,
de la Carne, del Algodón, el Instituto de Vitivinicultura, la Dirección
Nacional de Vialidad y, fundamentalmente, el Banco Central al mando de Ernesto
Bosch y Raúl Prebisch.
Pero no todo fue color rosa en su administración, también
ocurrieron horrores históricos que perjuricaron la vida democrática y la
economía local que trataremos más adelante.
En nuestra provincia, el 2 de febrero asumía el Dr. Luciano
Molinas uno de los políticos más destacados de la provincia y del Partido
Demócrata Progresista de Lisandro de la Torre. Molinas nació en Buenos Aires el
3 de enero de 1888, egresado como abogado en la Universidad Provincial, enseñó
sociología y economía política en la Facultad de Derecho de Santa Fe, fue
profesor y vicerrector del Colegio Nacional de Santa Fe, diputado provincial
entre 1916 y 1920 por el Departamento San Cristóbal; desde 1920 hasta 1928 dos
veces diputado nacional y entre 1928 y 1930 concejal de la ciudad capitalina.
Entre sus ministros podemos destacar a José N. Antelo, Abel
Furno, Luis María de la Vega y Alberto Casella. Molinas al asumir su gobierno
afirmó «cambiaría las estructuras económicas provinciales, mi gobierno será de
publicidad, de puertas abiertas y, sobre todo de manos limpias»[2],
siendo la primera de sus medidas la reimplantación de la Constitución
Provincial de 1921, la primera en el país en insertar los derechos de los
trabajadores y del constitucionalismo social, que había sido vetada durante el
gobierno radical de Enrique Mosca. Esto «trajo como lógica consecuencia una
reforma de gran profundidad en lo referente a los poderes mismos del Estado
Provincial y de numerosos organismos administrativos como la posibilidad de que
ciudades como Rosario y Santa Fe tuvieran sus propias cartas orgánicas, las
cuales fueron puestas en vigencias después de las convenciones constituyentes
municipales de 1933.
Mientras en Cañada de Gómez comenzaba un año con muchas
polémicas y un Concejo Deliberante caliente, a pesar de tener mayoría la
Alianza del PDP con el PS. El 1º de marzo asumieron los concejales electos el
17 de enero, siendo ellos, Ferruccio Ardigó y Enrique Thormohler por el PDP,
José Díaz y el Dr. Félix Pagani por el radicalismo y Genaro Aguilera por el
Socialismo, siendo el primer concejal de este origen que ocupara una banca en
la ciudad. Cabe destacar que en reiteradas oportunidades, en las actas del
Concejo Deliberantes con las que cuenta el Museo Histórico Municipal Elías
Bertola, en vez de poner el nombre de Genaro Aguilera cuando el edil dirigía la
palabra, el secretario del Concejo transcribía directamente lo siguiente «concejal
socialista» sin citarlo.
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| Luis Dalledone, Intendente 1932-1935 |
La primera autoridad provincial designada en la ciudad fue
Domingo Bonifatti como Jefe de Policía y el intendente municipal designado fue
Luis Dalledone, un joven demócrata nacido el 11 de junio de 1892 y que
falleciera a los 50 años el 13 de junio de 1942. Según expresara Vicente Leoni
en su Cañada de Gómez, hoy editado en 1963, «hubiera realizado una gran
obra, si no se lo hubiera impedido el pleito que sostuvo con la Compañía
Argentina de Electricidad, que
culminó con la toma de la usina ante la amenaza de desmantelamiento de la misma
y corte de la corriente eléctrica a la ciudad»[3]. Su
secretario, único miembro de gabinete por aquellos años, fue Arturo Augsburger.
Pero retornemos al Concejo, en las primeras sesiones de 1932
se caracterizaron por las polémicas declaraciones y denuncias que el líder del
P.D.P. Ferrucio Ardigó manifestó en las mismas. La primera de ellas fue la
expulsión como Secretario del Concejo de Francisco Torné, con quién había
tenido un grave conflicto en su anterior gestión en 1928. En su reemplazo fue
elegido Emilio Augsburger. Al ser una reapertura democrática se sorteó como iba
a realizarse el recambio a medio término, quedando con mandato hasta diciembre
del ´32 los concejales Pagani y Aguilera; para diciembre del ´33 los concejales
Ardigó, Thormohler y Díaz. Ese primer día de marzo, Genaro Aguilera propone que
los concejales tengan una pequeña dieta, ya que él era empleado debiendo
cumplir horario en su trabajo y además, el 50% de esa dieta sería destinada al
Partido Socialista para la concreción de actividades educativas y culturales.
Aguilera en su exposición declara que «...sin querer ofender, hace memoria de
aquellos ex Concejales que en forma jactanciosa demostraban renunciar a las
dietas, pero en chanchuyos, ganaron mucho más para su peculio...»[4] Esta
declaración fue apoyada por Ardigó quién agregó «veo legal y obligatoria la
moción del Sr. Concejal Aguilera, ya que bien podrían cobrar los ediles si se
tiene en cuenta, que otras veces mientras estos renunciaban a las dietas, los
Intendentes ponían las manos hasta el codo en las arcas fiscales...»[5] En el
periódico La Nota el cronista expresó que el concejal Aguilera «se apuntó tres
porotos, bien apuntados con lo del salario mínimo, y las cesantías de un
basurero y el cadete del concejo»[6];
sobre estos dos últimos casos Aguilera denunció persecución política hacia los
empleados municipales cesante, a lo que el concejal Ardigó respondió, «esas son
pamplinas, no se venga aquí con pamplinas, no le voy a permitir que prejuzgue,
lo hacemos cumpliendo el programa demócrata, que es economía, economía, más
economía»[7]. Por
su parte el edil socialista le replicó ante la pasividad del presidente del
cuerpo, «no señor, no son pamplinas, ustedes han respondido a razones políticas
y no me va a privar que to piense lo que me parezca con el caso»[8]. El
cadete por el cuál defendían los puestos de trabajo los ediles radicales y
socialistas era el recordado Mirandita. A la semana de habilitada la
etapa ordinaria del Concejo, Ardigó vuelve a polemizar cuando denuncia que
«vengo peleando contra la quiniela desde 1928, pero no encontré réditos en mis
colegas. A pesar que el 28 de febrero de 1931 se decretó la prohibición del juego
de azar, poniendo como plazo el 31 de marzo, ese mismo día el Intendente de
Facto David Miles, decretó la continuación del juego»[9]. Aguilera,
a raíz de esta denuncia, propone crear una ordenanza que prohiba el juego de
azar, lotería, quiniela y boleta de sports, la misma fue aprobada y llevó el
número 104. Ese mismo día, el 8 de marzo del treinta y dos, el líder
democrataprogresista, continúa con sus denuncias, esta vez atacando a los
mandatarios anteriores a Miles, donde según Ardigó, los ex intendentes
radicales que estuvieron en 1928 se manejaron de forma dudosa en la firma de un
contrato entre el Municipio y una empresa contratista de obra. Ese contrato
destinaba $16.000 para la construcción de baños públicos en la Plaza San
Martín, que finalmente salió $30.500, pero los baños fueron al templo
parroquial. «Ese contrato fue el último malón a los dinero de la Municipalidad
de Cañada de Gómez por parte de los radicales unificados»[10],
añadió don Ferrucio, «en cuyo mal proceder lo siguieron los llamados radicales
yrigoyenistas. Este contrato fue una vergüenza desde el principio hasta el fin»[11]. Ese
día, entre las denuncias opositoras y el silencio oficial, nació la Comisión
Investigadora de la Construcción de Retretes en la Casa Parroquial. Finalmente,
a la semana siguiente, Ardigó fue más directo hacia el supuesto mal desempeño
de David Miles como Intendente de facto local. Las acusaciones a la primera
gestión dictatorial de Cañada fueron doce puntos a citar…
«1º - Se trazó un pleito – el
de los caminos – cuya probabilidad de ganarlo era inmensamente superior al de
perderlo, dándolo por perdido, con grave perjuicio de las finanzas comunales. En
el peor de los casos – lo que no admito – que se pudiera haber perdido, el Juez
no podría haber condenado a esta Municipalidad, más que a pagar el trabajo
hecho por el contratista, cuyo valor máximo podría llegar a diez mil pesos,
siendo que trabajo de Mayo de 1928 a Enero de 1929, abandonando en esta fecha
el trabajo dicho contratista. La Municipalidad perdió en esta transacción a
entrega, la suma de 20 mil pesos, por culpa del Señor Miles.
»2º - El mismo Intendente de
facto quiso transar otro pleito, el de anulación del clandestino contrato con
la empresa de alumbrado – ganado en primera instancia a los pocos días de esa
intentona descabellada y se frustraron sus designios fue porque se opuso a esas
miras el defensor de la Municipalidad, el cual amenazó con cobrar los
honorarios del pleito, al mismo Intendente, si transaba dicho acuerdo,
totalmente por esto desistió el Señor Miles de llevar a cabo su proyecto
nefasto recién cuando termine este asunto se podrá revalorizar en todas sus
partes. Por lo pronto la justicia falló a favor de la Municipalidad, lo que es
un signo promisor.
»3º - Malversó la suma de
$1775 – en las obras de cloacas y servicio de agua para un mal llamado servicio
publico en la casa parroquial, cuyo gasto debe pagar el propietario de la finca
o el responsable de esa dilapidación del dinero del pueblo, como deliberó, esta
noche el Honorable Concejo Deliberante. Sin duda confundió el Intendente de
facto sus sentimientos religiosos con el dinero del pueblo, que tenía la
obligación de no malversar.
»4º - Malgastó pesos 700 en
vinos, etc., cuando la inauguración de las Obras Sanitarias para lucirse con el
dinero del pueblo.
»5º - Olvidarse que cobraba pesos 100 mensuales para
gastos de representación cuya inversión nunca justificó – gasto pesos 1471 en
viajes y pesos 225 por el Intendente interino total pesos 1676 cargando a la
Municipalidad sumas escandalosas como la que figura en el decreto de de fecha
10 de julio de 1931 por un viaje a Buenos Aires los días 5,6,7 y 8 cobrándose
200 pesos y teniéndose presente que el pasaje a lo sumo costó 45 pesos, resulta
que nuestro Lord mayor cobro por el solo concepto de hotel pesos 38 con 74
efectivos por día.
»6º - Usó y abusó de chapas
oficiales para sus autos particulares.
»7º - Gastó más de 3000 pesos
en sostener una escuela de 2º enseñanza que no figuraba en el presupuesto,
olvidándose de seguir dando la Copa de Leche a los niños de las escuelas
elementales.
»8º - Violó la ley nº 2147 en
su artículo 48 gastando las sumas de $2050 y $2550 sin llamar a licitación como
era su deber.
»9º - En fecha 25 de Abril de
1931 dio un decreto ampliando en $6000 dos partidas (3000 cada una) asignado de
estas al Capítulo 2 Inciso 6 Ítem 2 que se refería a un auxiliar mayordomo con
$100 – mensuales, siendo inadmisible que si por todo el año se había
presupuestado $1200 a los tres meses se hubiera agotado la partida, con la
salida de 300 pesos. Admitiendo sea esto un error, pero llama la atención que
no se haya corregido está el hecho para el Decreto, dice lo que acaba de leer.
»10º - Si alguna dádiva otorgó
el Intendente varias de ellas fueron para sostener y propagar sus sentimientos clericales;
respetables sin dudas como todas creencias, pero es necesario criticar porque
era dinero de gente de muchas creencias, y por lo tanto no se le debía dar ese
destino.
»11º - En fecha 3 de marzo de
1931 el Intendente de Facto dio un decreto cuyos considerandos son pobrísimos,
en el cual exonera de patentes de rodados a los coches fúnebres de 1º y 2º
clase que era de 50 y 25 pesos cada uno. Este decreto es una enormidad, por
cuanto es sabido que los dueños de coches fúnebres, pueden muy bien pagar los
impuestos de rodados por ser elevadas las sumas que perciben cuando salen en
función dichos carros. Sin dudas había sido mas justo y humanitario limitar o
exonerar de impuestos los coches o autos de alquileres manejados por sus dueños
que tuvieran un solo vehículo.
»12º - También esta mal
gastada la suma de de unos 250 pesos por la impresión del librito con el
calculo de recursos y gastos de la Municipalidad año 1932, publicación engañosa y tendenciosa
por cuanto se omitió publicar que la aprobación de ese presupuesto era
ad-referendum del H. Concejo Deliberante y no definitivo, gasto que habrá que
renovarse para que la publicación conozca el presupuesto Municipal legal»[12].
La comunidad de Villa Eloísa peleaba por su independencia
administrativa. Y fue en este año cuando el gobernador Molinas tomó la decisión
de conformar su primera comisión administradora y fue la Municipalidad de
Cañada de Gómez quién eligió a los primeros hombres en conducir los destinos de
esta vecina localidad. El acta constitutiva nos indicaba que
«En Villa Eloísa a los
veintiún días del mes de marzo de 1932, la Comisión Vecinal Administradora
Municipal, integrada por sus miembros, don Pedro Cusanelli, como presidente;
don Gabriel Prelato, como secretario; don José Biazzi, como tesorero, y los
señores Jorge Tudor y Luis Galletti como vocales, se hacen cargo de los muebles
y útiles varios y demás efectos…»[13]
El 30 de marzo renuncia a su banca de concejal, sin haber
asistido a ninguna de ellas, el Dr. Félix Pagani. Su reemplazante sería
Santiago Duncan pero al no aceptar el cargo asume como edil Agustín Borgogno.
En esos días nuestro arroyo sufre un pequeño desborde que
hace preocupar a las autoridades municipales por la demora en las obras de
canalización que llevaba adelante la provincia. Pero Dalledone no era el único
incoveniente que tenía en esos primeros meses de su gestión, la Compañía de Luz
le reclamaba una deuda cercana a los ciento diez mil pesos y que los últimos
cinco meses de Miles, el municipio no había abonado la cuota mensual. La crisis
económica todavía pegaba fuerte en la sociedad y los precios de las carnes
subieron alevosamente. El intendente era especialista en la ganadería y en una
carta enviada al concejo manifestó que los carniceros «no pueden bajar los
costos por la considerable disminución de las ventas como consecuencia de la
crisis»[14], fue
así que el concejal Aguilera propuso la creación de una cooperativa de
carniceros para abaratar los costos contrario a lo que pretendían Ardigó y Díaz
de crear un puesto de abastecimiento de carnes en precios populares que
perjudicarían a los carniceros locales, finalmente se aprobó este proyecto y en
la Mixta, ubicada en Lavalle 916, funcionó por un tiempo ese puesto. Pero
también la Cooperativa se formó y la presidió Miguel Ardizzi.
Otra de las duras discusiones que sobresalieron en la sala
de sesiones del Concejo, fue el entredicho entre los ediles Ardigó y Borgogno.
El primero de ellos pidió informe al Departamento Ejecutivo sobre los destinos
de la donación realizada por Domingo Albertengo y Agustín Borgogno. Éste último
aclaró los puntos, donde lo frenó a Ardigó tratándolo un poco más de mentiroso,
lo acusó de hablar para la barricada y no como el funcionario que és. El resto
del cuerpo legislativo trató de frenar esta discusión que pasaba los límites
normales de una reunión. A la semana siguiente, estamos hablando del 26 de
abril, Ardigó tomó la palabra y pidió disculpas por los exabruptos y que para
nada quería ofender a la honorabilidad de Albertengo y Ardigó, sino que su
pedido de informe era dirigido al intendente de facto David Miles, donde una
vez más el demócrata progresista expresa que Miles con los dineros públicos
violó sus deberes de funcionario público. Aunque no terminó ahí esa pelea, a
las cinco sesiones después de ésta, Ardigó pidió que se le aplique una multa de
trescientos pesos a Borgogno por las reiteradas ausencias a las sesiones. A
través de la Resolución Nº 20, el Concejo Deliberante facultó al Ejecutivo
Municipal a iniciar acciones legales contra David Miles a los efectos de
obtener el reembolso correspondiente. Otra irregularidad encontrada entre los
años 1930 y 1931, fue el dinero que se le entregó a una empresa constructora de
una obra que jamás se realizó y donde también se llevó a la Justicia el tema.
Cabe agregar, que finalizado 1932, el primer intendente de las dictaduras en la
ciudad todavía no había devuelto los dineros a las arcas municipales de ninguno
de los casos por el cuál se lo encontró culpable.
Durante el mes de mayo el intendente Dalledone mantenía en
vigencia el decreto de la gestión anterior que anulaba la subvención de la Copa
de Leche a la Escuela Normal. Recordemos que David Miles no sólo las anuló sino
que tampoco abonó las deudas que el municipio mantenía con el establecimiento,
de igual manera hicieron con la Sociedad de Damas de Beneficencia. El día 17 la
empresa Faccini Hnos. y Felipe Fernández ingresaron el pedido para la
circulación de un ómnibus que unía Rosario con nuestra ciudad. También en este
mes, Dalledone le envía una correspondencia al Ing. Dante Ardigó, quién
presidia el Consejo General de Educación, donde le informa la idea de construir
una plaza para niños y niñas en la ex Plaza Argentina, donde actualmente se
encuentra el Club Atlético América. La misma expresa que
«Desde hace años se ha venido
proyectando en el Honorable Concejo Deliberante la construcción de una plaza de
niños en esta Ciudad, proyecto que nunca pudo realizarse por la desidia de los
funcionarios anteriores(…) Próximo al barrio más humilde de esta Ciudad,
vecindario que desgraciadamente no cuenta con una sola plaza donde se pueda
respirar aire puro y donde les sea posible a los niños descansar lejos de la
asfixiante atmósfera de las viviendas insalubres, que están sin lugar a dudas
predispuestos a que la mortalidad por tuberculosis alcance cifras elevadas»[15]
Quizás la jornada más brillante que se vivió durante este
año fue la inauguración de dos imponentes edificios en nuestra ciudad. El 22 de
mayo la sede del Club Social y la sede del Banco Provincial de Santa Fe
comenzaron a engalanar el paisaje urbano cañadense. Aquel día contó con la
presencia del gobernador Luciano Molinas acompañado de los ministros de
Gobierno, Dr. José Antelo; de Hacienda, Ing. Alberto Casella y de Instrucción
Pública, Dr. Abel Furno. En nuestra ciudad lo recibió una comitiva presidida
por el intendente Dalledone e integrada por el Cav. Ottorino Beltrame, el Jefe
de Policía Bonifatti, Pío Alberdi, Eugenio Maranetto, el Jefe del Distrito
Militar Mayor Pedro Palenque, Mariano Serrano, Juan Bima, Santiago Malori, Abel
Blasco, Bautista Chiaverano, Eugenio Vázquez, Ricardo Cónsul Romegialli, el ex
intendente Juan Feno, O.Oliver, Miguel Mondino, el Dr. José Sanz, Alberto
Batalla Gómez y Florencio Varni. Los actos comenzaron por la mañana bien
temprano con la llegada de las autoridades a la Jefatura de Policía,
posteriormente fueron a recorrer las obras de canalización del arroyo y ver el
estado en que se encontraban, visitaron el Hospital, la Curtiembre Beltrame y
La Helvética. A las 10.30 se inauguró el edificio del Banco Provincial, a las
11.30 hicieron lo mismo en el Club Social y posteriormente en el salón Blanco
de la Jefatura se sirvió un lunch con la presencia del Senador Provincial
Eduardo Carasa. Luego del banquete se dirigieron al Círculo Social y a las
15.30 el gobernado le brindó un homenaje a los aviadores Juan Arfinetti y Rosa
Rey. Finalmente a las 16 horas asistió al encuentro entre Sport Club Cañadense
y Everton en el estadio del Celeste.
Quién aprovechó la visita fue Dalledone, quién le escribió
al gobernador Molinas al conocerse la puesta en marcha de la Constitución del
´21, manifestando que la provincia «necesitaba el surgimiento de hombres de su
temple y capacidad dando fin a todas las irregularidades que implicaban los
deshonestos gobiernos de la oligarquía y otorgar a ésta rica provincia, tan
vejada, la verdadera Constitución que merecía»[16]
También el primer mandatario cañadense debió defenderse de nuevas críticas de
los concejales, esta vez por críticas en el escalafón municipal, Dalledone les
respondió diciendo que
«Se debilitó la autoridad
ejecutiva por la intromisión de un poder incompetente haciendo entreveer que su
influencia es la causa de una reparación, hayan o no fundametos del acto
cometido (…) Que en lo administrativo, el Intendente es el único y directamente
responsable morel y materialmente, ante la opinión pública, ante el Gobierno
que le ha confiado el alto honor de representarlo y ante el Partido que tiene
contraído un compromiso de honor de administración sana y honesta…»[17]
Otro conflicto que comenzó en este año fue el entablado
entre el Concejo y el Hospital de Caridad, al cuál nunca se le aporbó sus
balances ya que los gastos especificados en el mismo no eran claros y concisos.
También en la última sesión de mayo se crea la Oficina de Cobros Judiciales.
El 29 de junio, la Sociedad Damas de Beneficencia invitó a «presenciar los actos de inauguración de la sala de maternidad en el Hospital San José los que serán apadrinados por la Sra. María Salomé Freyre de Iriondo y su esposo el Dr. Manuel María de Iriondo, gobernador de la provincia de Santa Fe».
Los cañadenses llevaban apenas un año disfrutando el
flamante servicio de auas corrientes y cloacas, que comenzaron a llegar las
primeras facturas y los vecinos que pretendían los beneficios del mismo, se
asombraban de los altísimos costos. Por eso el pueblo se autoconvocó en
asambleas, apoyadas desde todos los estamentos públicos, para reclamarle al
directorio de Obras Sanitarias de la Nación un poco de contemplación.
Recordemos que aún se vivían los finales de la crisis del ´30. Moisés Sironi
era quién presidía una de ellas, llamadas Comisión Modificación de Tarifas. La
reunión se realizó en el Teatro Verdi donde asistieron unas doscientas
personas, donde la mayoría de ellos trató de «extorsivo» las condiciones que la
empresa pretendía hacer en Cañada de Gómez.
Durante el mes de julio, una pequeña epidemia de triquinosis
ocasionó que diez personas sufrieran las consecuencias de esa enfermedad,
bastante complicada en aquellos tiempos. En el periódico El Radical, que como
bien dice su nombre, era un órgano de publicidad de la U.C.R., podemos leer
«Nos informan los médicos de
esta ciudad, que se ha producido ya diez casos de triquinosis, enfermedad
producida por comer carne de animales enfermos, y especialmente de cerdos.
»La enfermedad en sí es
gravísima, y rara vez el enfermo se cura, habiéndose producido en esta ciudad
tal cantidad de casos, que no se recuerda precedente.
»Sabemos que se han llamado
urgentemente trés médicos rosarinos para estudiar los diferentes casos
producidos.
»Esta lamentable realidad,
comprueba con cuanta razón hemos criticado hace ya tiempo la supresión del
médico veterinario municipal, y los lectores recordarán que El Radical fue el
primer periódico de esta ciudad que levantó la voz en señal de protesta por tan
torpe medida(…)
»La Municipalidad de Cañada de
Gómez deberá tomar de inmediato las medidas del caso, si quiere evitar que el
Pueblo tome de por si las medidas urgentes que terminarán con tanto desquicio»[18].
La gestión de Dalledone, como vemos, seguía su marcha a
pesar de las innumerables trabas a las cuales debía sortear. El estado de las
finanzas, las deudas heredadas, el histórico jucio con la Compañía de Luz y una
ciudad prácticamente abandonada era el escenario en que debió manejarse la
administración demócrata progresista. Pero ello no evitó que se adquirieran las
dos manzanas linderas al Cementerio, donde actualmente se encuentran los
estacionamientos, se urbanizara gran parte del Bv. Centenario hacia el norte,
se consiguiera los terrenos para el ensanche del ingreso sur a la ciudad por
calle Quito, hoy Ovidio Lagos, y Castelli, se logró la donación para el cruce
del camino que unía Rosario-Tortugas por la Estancia Del Sel que por nuestra
ciudad pasaba por Bv. López, arteria que se logró ampliar para tal motivo y
también se retomó la idea de construir la Plaza de los Niños, como se citó
anteriormente, a tal punto que el 28 de septiembre de 1932 se le solicitó al
presidente del Club América, Esteban Chiaverano, que dicha institución
devolviera a la ciudad esa manzana para la construcción de la misma.
Una publicación del 20 de agosto nos describe la cruda
realidad que vivía la ciudad…
«Cañada es una ciudad, pues la
forman hombres. Estos, como tales, tienen problemas. Los tiene por lo tanto, el
todo que los comprende, nuevamente Cañada. Tales problemas son de distintas
clases. ¿Quién los ignora? Problemas económicos, políticos, religiosos, culturales,
morales, artísticos… Habiendo desocupados a montones por sus calles, y en sus
alrededores, establecimientos de comercios que han reducido su personal, otros
que han quebrado, hambre y frío en muchos hogares, ¿cómo negar la evidencia de los
problemas económicos?»[19]
Durante este año el conflicto con la Compañía de Luz llegó a
su punto de mayor ebullición. Durante la administración Casañas, el ex
intendente le renovó a la empresa su contrato seis años antes que venza. Eso
contrajo un pleito judicial que tuvo su primera sentencia a favor de la
empresa, el mismo fue apelado por la Municipalidad y dicho recurso salió
favorable a la misma. La decisión del juez fue muy clara, el contrato era nulo.
El Intendente Dalledone el 22 de noviembre le envío una correspondencia al
gobernador Molinas, donde le manifiesta que
«La celebración, al margen de
las leyes, de un contrato con seis años de anticipación al vencimiento del
primitivo, sin tener en cuenta siquiera los más elementales requisitos, con la
Compañía de Luz Eléctrica que actualmente presta este servicio y que
posteriormente, al asumir sus funciones los concejales electos en 1929, se consideró
ilegal, iniciándose en los Tribunales de la ciudad de Rosario, el juicio por
nulidad, pleito que hace más de dos años ha fallado a favor de la Municipalidad
de Cañada de Gómez, declarando la nulidad absoluta el juez Dr. Palacios.
»A pesar del tiempo
transcurrido y de haber vencido el contrato original el 11 de noviembre de
1931, la Segunda Sala de la Cámara de Apelaciones, donde se encuentra radicado
el juicio, pese a las solicitudes verbales de nuestra Asesoría Letrada, no se
ha conseguido aún el fallo definitivo.
»Cuantiosos intereses
colectivos se encuentran en juego y la población reclama y espera de las
autoridads municipales el mayor celo, preocupándole ya la rpolongada como
injustificada demora en sobre guardia de sus legítimos derechos e intereses
seriamente lesionados. La depresión económica mundialmente hace meditar a todos
los organismos y entidades a fin de aliviar cuando es posible las
contribuciones de todo orden. En esta misión me hallo empeñado y con señalada
justificación en nuestra ciudad (…)»[20]
La carta continúa expresando el deseo de Dalledone de
construir una nueva usina y le explica al gobernador la manera…
«Seriamente gravada con la
implantación de Obras Sanitarias de la Nación, sería el momento de reclamar de
esta Institución la inversión de la suma de $400.000 moneda legal, que
aproximadamente han restado como sobrante de estas construcciones, para ser
invertidas en la instalación de una usina de Luz y Fuerza que, es de todos
conocidos, presta este servicio a un precio ínfimo con la ventaja que después
de determinado tiempo pasa a ser propiedad municipal.
»Es por este motivo, Sr.
Gobernador, que me permito molestar su atención en la seguridad de que toda la
población de esta progresista ciudad sabrá valorar positivamente las gestiones
que tiendan a la solución de este serio problema…»[21]
El conflicto tardó varios años más en solucionarse, en una
publicación de la revista Redes Argentinas de 1946 relata que la Compañía
Argentina de Electricidad S.A. «desde el año 1932 provee el servicio de luz y
fuerza motriz con carácter precario»[22].
El año político termina con el ingreso de los nuevos
concejales Ramón Cabero y Luis Bianchi, en reemplazo de Borgogno y Aguilera.
Con la partida de este último, nuestra ciudad debió esperar sesenta y un años
para volver a tener un concejal de origen socialista. La presidencia del cuerpo
legislativo quedó nuevamente en manos de Thormohler, siendo Díaz y Cabero los
vicepresidentes.
La educación durante este año tuvo la apertura de una nueva
escuela, la denominada Modesto Ergueta, en homenaje al primer director de las
escuelas cañadenses. Se encontraba sobre los terrenos de los Bianchi, y en un
testimonio que me brindara Eglis Montoya recuerda que en «la calle Yrigoyen, en
aquellos tiempos Humberto 1º, habia una escuelita que se llamaba Ergueta, casi
cerca de la ruta 9, venian chicos del campo…»[23].
«La Escuela Nº 492 ubicada en
el Barrio Bianchi fue habilitada merced a un decreto del superior gobierno de
la provincia y con fecha 15 de febrero de 1932. La primera directora del
establecimiento fue la señorita Asunción Ergueta, que al frente de la pequeña
escuelita supo emprender iniciativas fecundas, dictando algunas disposiciones
que beneficiaron al alumnado.
»La primera inscripción fue de
80 niños que habían pertenecido antes a la Escuela Lainez, lo mismo que el
moblaje que ocupaba el edificio en el barrio Centenario y depositado en la
escuela 223.
»Nuevas solicitudes para
ingresar al establecimiento hicieron ver la necesidad de aumentar el personal,
designándose a la señorita Emilia C. Milano como ayudanta. El nombramiento se
produjo el 19 de octubre de 1932. Paulatinamente fue creciendo el número de
colegiales y se llegó al siguiente año con un total de 122»[24]
La figura destacada en esta llegada fue el presidente del Consejo
de Educación de la Provincia Dante Ardigó, quién no dudó en apoyar esta creación.
La Asociación Española de Socorros Mutuos comenzó en el mes
de febrero el loteo del Prado Español, la empresa que lo llevó a cabo fue la de
Justo Peralta con una base muy irrisoria de $1,40. Con ese dinero, los
españoles compraron el proyector de cine para el Teatro Cervantes. El 15 de
mayo la oficina de Correos se trasladó a Lavalle 1050 donde estuvo hasta la década
del cincuenta. En las jornadas de la conmemoración de los días de Todos los
Santos y de los Difuntos, se colocó la piedra fundamental de la capilla San
Ignacio de Loyola en nuestro cementerio local siendo bendecida la misma por Monseñor
Manuel Aizpuru. El 24 de diciembre se conoce en nuestra ciudad el proyecto de
pavimentación y trazo que se asignara al primer tramo del camino
Rosario–Córdoba, es decir desde Rosario hasta nuestra ciudad.
En el ambiente cultural, el 16 de enero en el Cervantes
se realizó una función a beneficio de Cooperadoras escolares, discurso a cargo
de Nélida Niesi, Poesía Nuevos Héroes por el consagrado escritor José
Cagnin y se exhibió la película Sin novedad en el frente. Un día después,
la Unión Cívica Radical Comité Nacional, inicia en la fecha un breve ciclo de
conferencias a cargo de oradores, correligionarios, simpatizantes, anunciando
además la creación de una biblioteca y un salón de lecturas, para uso de sus
afiliados. El 2 de noviembre el Centro Social Esteban Gimenez, realizó
una gran velada en la sala del Teatro Cervantes, el motivo fue el 1º
aniversario de la misma siendo su secretario general el Sr. Miguel Ardizzi. El 14
de diciembre el cuadro Tradición y Pampa organizó, en el mismo teatro,
una actividad que dirigió Antonio Cremona. Las obras que se pusieron en escena
fueron Y se terminaron los criollos y el monólogo El Pescador a
cargo del niño Fernando Calderó. El 25 de diciembre nace una nueva banda de
música la formaron José Covi, Alfredo Munini, Pedro Besso, Virgilio Salis bajo
la dirección de Augusto Principi.
El deporte tuvo un año con buenas noticias y fundaciones. El
4 de enero, Ceferino Abregú y Ernesto Piccinini, dieron a conocer a nuestra
ciudad que iban a participar en el Gran Premio Nacional de Automovilismo de ese
año, y lo harían en el coche que condujera el malogrado Lalo Déstefano, por
razones económicas el sueño, no fue realidad. El 2 de marzo, el Sport Club
Cañadense desde su seno, elije una Subcomisión para la construcción de una
pileta de natación en sus instalaciones fue compuesta por Abel Blasco presidente,
César Bortolatto secretario, Miguel Mondino tesorero, Dr. Santiago D´Onofrio,
Ricardo Romegialli e Italo Beltrame como vocales. El mismo día, Juan Arfinetti
obtiene el brevet de aviador de primera categoría, sus estudios sobresalientes
iniciados el 27 de marzo de 1930, vale decir que en sólo dos años alcanzó lo
máximo en aviación civil. El 14 del mismo mes, Juan Bailm gana la competencia
ciclística Doble Tortugas, con una ventaja de sólo dos máquinas,
esfuerzo extraordinario en el último embalaje, fue muy aplaudido y felicitado. El
5 de mayo, en la localidad de Carcarañá se realizó una justa de ciclismo,
participaron 8 corredores, la distancia 10 vueltas al pueblo, unos 25
kilómetros, en reñido final logra el triunfo nuestro pedal Juan Baiml, segundo
otro cañadense, Dante Zeballos. El 23 del mismo mes, Manuel Abregú obtiene el
primer puesto en el campeonato santafesino de velocidad. El 11 de junio, se
realizó un gran festival de boxeo entre aficionados locales y la Academia de
Capiello de Rosario, la primera pelea a cargo de Hugo Bartolacci, El pibe de
la Usina, liviano cañadense con el rosarino Alejandro Adalit, ganó el cañadense
por abandono; la segunda pelea, encuentro a 5 rounds 2 x 1, se presentó el
medio mediano cañadense José Cagnin, El roncador de la Normal, con Juan
Santamaría rosarino del mismo peso, ganó el cañadense por nocaut técnico;
finalmente luego se presentaron el cañadense Luis Schaad y el campeón santafesino
José Audino, ambos de 72 kgs., esta pelea no tuvo vencedor y no conformó al
público presente. El 28 de julio para reabastecerse de combustible aterriza en
el campo de aviación la máquina de conduce a Vicente Solano, diputado
provincial de Buenos Aires. El 13 de octubre se conforma la Liga Independiente
de Fútbol, siendo su presidente Luis Stochero, la componían nueve equipos, Los
Rojos, Argentino Jrs., Independiente, Alem, Sportivo Rivadavia, Gath y Chaves,
Huracán, Sportivo Nacional y Belgrano, todos ellos oriundos de nuestra ciudad.
El 11 de noviembre se funda el Club Atlético Talleres. El 7 de diciembre Juan
Arfinetti conduce desde Buenos Aires un avión adquirido por David Miles, consiguiendo
así llegando a la tercera máquina para nuestro Aeródromo. El 16 de diciembre en
la sede del Boxing Club Cañadense, en Chañares, hoy 7 de octubre, y Moreno, se
realizó un interesante festival de boxeo donde los valores Milineski y Maccari,
ofrecieron una demostración, luego calzaron guantes los livianos Caminos y
Astegiano, siendo empate; posteriormen los pugilistas Palmieri y Lencinas y en
la pelea de fondo se enfrentaron el cañadense Luis Schaad con el nicoleño
J. Sacrispanti resultando el cañadense el ganador.
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| Vicente Rojas en Independiente de Avellaneda |
Una grata noticia de nuestro fútbol, el jugador oriundo del Apache,
Vicente Rojas, destacado futbolista que también brillara en el recordado Club
Unión Central, es probado el 25 de noviembre, por el Club Rosario Central en un partido
contra Independiente de Avellaneda, este fue el despegue de Rojas, quién llegó
a ser estrella del fútbol porteño. El 9 de diciembre, el Rojo de Avellaneda ofrece
una prima de dos mil quinientos pesos y sueldo mensual, y termina contratando
al jugador cañadense. Finalmete debutó en 1934 en el fútbol mayor de Argentina,
siendo el primer cañadense en llegar a ese nivel.
Dejando de lado nuestra ciudad, en Rosario es noticia un
grave asesinato. El hecho ocurrió el 8 de octubre, cuando reaparece el comerciante
Favelukes, quien había sido secuestrado. Esa noche es asesinado en su pensión
el periodista Silvio Alzogaray, el único que había denunciado que se trataba de
un secuestro mafioso realizado por la organización polaca Zwi Migdal.
El cine nos brindó los siguientes estrenos, Adiós a las
armas de Frank Borzage; Lluvia de Lewis Milestone; Boudu salvado
de las aguas de Jean Renoir; El expreso de Shanghai de Josef Von
Sternberg; Grand Hotel de Edmund Goulding; He nacido, pero… de
Yasujirō Ozu; El hombre y el monstruo de Rouben Mamoulian; La legión
de los hombres sin alma de Victor Halperin; Lo mejor es lo malo conocido
de Alfred Hitchcock; El malvado Zaroff de Irving Pichel y Ernest B.
Schoedsack; La momia de Karl Freund; Número 17 de Alfred Hitchcock;
La parada de los monstruos de Tod Browning; Plumas de caballo de
Norman Z. McLeod; El signo de la cruz de Cecil B. DeMille; Soy un
fugitivo de Mervyn LeRoy; Tarzán de los monos de W. S. Van Dyke; La
Venus rubia de Josef Von Sternberg; Movie Crazy de Clyde Bruckman; Quería
un millonario de John G. Blystone; La Irreflexiva de Kenneth
MacKenna; The Trial of Vivienne Ware de William K. Howard; Scarface
de Howard Hawks y Richard Rosson; Vampyr de Carl Theodor Dreyer. Por su
parte en el cine argentino se estrenó La barra de Taponazo de Alejandro
del Conte; Consejo de tango de Luis José Moglia Barth y En el infierno del Chaco de Roque Funes.
Los nacimientos de este año fueron el 1 de enero, Oscar Viale, actor, comediante, dramaturgo y
guionista argentino; el 5 de enero, Umberto Eco, semiólogo, escritor y filósofo
italiano; el 29 de enero, Mabel Landó, actriz argentina; el 6 de febrero, Camilo
Cienfuegos, revolucionario cubano; el 27 de febrero, Elizabeth Taylor, actriz
estadounidense; el 5 de marzo, Dina Rot, cantante, pianista y musicóloga
argentina; el 25 de marzo, Osvaldo Pacheco actor argentino; el 18 de abril, Sara
Facio, fotógrafa argentina; el 8 de mayo, Carlo Cossutta, tenor ítaloargentino;
el 17 de julio, Quino, Joaquín Lavado, humorista gráfico argentino; el 28 de
septiembre, Víctor Jara, cantautor chileno; el 28 de noviembre, Gato Barbieri,
saxofonista argentino de jazz y el 25 de diciembre, Walter Santa Ana, actor
argentino.
Sport Club Cañadense obtiene el primer tricampeonato de su
historia y el primero en la historia de la Liga. El título lo obtuvo en un
rotundo triunfo 4 a 1 frente a Unión Central en un partido desempate. Para Los
Celestes jugaron Cupulutti; Chiara y Giordano; Marani, Beltramone y Seguetti;
Portman, Cuitiño, Perrone, Gaite y Váldez.
Por su parte, River Plate comandado por el entrenador Víctor
Caamaño, se consagra por primera vez en el profesionalismo, campeón del fútbol
argentino. Fue decisivo para ese logro la contratación del extraordinario
goleador Bernabé Ferreyra, a la postre el máximo anotador del certamen con una
amplia diferencia sobre sus seguidores.
[14] Copiador de la Municipalidad de Cañada de Gómez.
Archivo del Museo Histórico Municipal Elías Bertola.
[15] Copiador de la Municipalidad de Cañada de Gómez.
Archivo del Museo Histórico Municipal Elías Bertola.
[18] El Radical, 1º de julio de 1932
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